El paso del tiempo, los embarazos y la menopausia son los factores principales que afectan a todas las partes del cuerpo femenino y, entre ellas, también a la zona íntima. El tejido vaginal está formado por fibras de colágeno que con el paso del tiempo se van estirando y, por tanto, perdiendo. Esto produce irritación, sequedad y pérdida de tono a la vez que flacidez en la zona genital y todo esto afecta directamente a la calidad de la vida sexual de las mujeres e incluso puede producir otras disfunciones como la incontinencia urinaria.
Frente a estos problemas, la cirugía genital femenina se sitúa como una alternativa para solucionarlos y mejorar así el bienestar íntimo de las mujeres. Esta cirugía no sólo mejora la vida íntima de las pacientes sino también otras disfunciones del suelo pélvico como lo son la incontinencia urinaria. Esto significa que no se trata solamente de una intervención con motivos estéticos sino que puede suponer la diferencia entre tener mejor calidad de vida o no.
¿En qué consiste la cirugía genital femenina o labioplastia?
La cirugía genital femenina también conocida como labioplastia es una intervención cada vez más demandada entre las mujeres. Los embarazos y la edad son los causantes de que la zona genital femenina cambie y pierda elasticidad. Por ello, esta cirugía estética se presenta como solución para proporcionar a la zona íntima el aspecto joven deseado.
La cirugía genital femenina se realiza sobre todo en los labios menores para lograr unos labios genitales simétricos al considerar los actuales demasiado grandes o asimétricos. Se trata de reducir los labios menores que han perdido forma y volumen y devolverles un aspecto mejor estéticamente hablando.
La intervención quirúrgica es de corta duración realizándose en 30 o 40 minutos bajo anestesia local. Esta cirugía genital femenina se realiza mediante una pequeña incisión con la que se elimina la piel sobrante al mismo tiempo que la mucosa y la grasa que aporta el exceso de volumen en la zona.
¿Quiénes son los candidatos ideales?
Cualquier mujer puede realizarse una cirugía genital femenina si no está contenta con el aspecto de su zona íntima. Sin embargo, las pacientes más comunes son las mujeres postmenopáusicas que tienen flacidez e incontinencia urinaria y desean mejorar su calidad de vida. Aunque también existen pacientes jóvenes alrededor de los 30 años que desean unos labios externos que se cierren por completo delineando una línea vertical, es decir, son razones estéticas las que las llevan a someterse a una labioplastia.
El postoperatorio y los resultados de la cirugía genital femenina
El postoperatorio de la cirugía genital femenina es muy fácil de llevar ya que esta intervención no requiere hospitalización. Tras la cirugía, la paciente notará una hinchazón que irá desapareciendo poco a poco. Se recomienda reposo de las 24 hasta las 48 horas siguientes y reposo relativo los primeros cinco días. Después de ese tiempo, la paciente podrá realizar vida normal y a lo largo del primer mes la inflamación desaparecerá junto a los puntos de sutura de forma natural. Para apreciar los resultados definitivos hay que esperar al mes y medio aproximadamente tiempo durante el cual la paciente no deberá mantener relaciones sexuales para prevenir una mala cicatrización.
Muchas mujeres se preocupan por la pérdida de sensibilidad tras una cirugía genital femenina, pero ésta no debe suponer una preocupación ya que normalmente no se da. De hecho, el nivel de satisfacción de la labioplastia tiende a ser muy alto y las mujeres que se han operado sienten que recuperan algo más que la forma de sus genitales, sienten que recuperan autoestima y calidad de vida.
En Cosmédica contamos con un equipo médico altamente cualificado y preocupado por el bienestar y la satisfacción de nuestras pacientes. Si te estás planteando la cirugía genital femenina, no dudes en solicitarnos información. Te esperamos.