Mentoplastia o cirugía estética del mentón

La cirugía estética del mentón o mentoplastia es una cirugía que busca reconstruir la terminación de la mandíbula. El mentón es uno de los rasgos más característicos de la cara y su morfología puede modificar radicalmente la estructura facial.

Con la mentoplastia se corrige un fallo en el mentón, tanto si se trata de poca proyección o de un tamaño excesivo o muy pronunciado. La forma de la mandíbula es la que determina el perfil facial y determina el aspecto de la cara. Tener un mentón deprimido o demasiado pronunciado puede alterar la estética facial, por lo que es fundamental que la estructura de la cara tenga una armonía y un equilibrio entre todos sus rasgos. De esta manera, con un mentón de forma y tamaño adecuado se puede dar el carácter y personalidad al rostro, suavizar las facciones, o aportar una sensación de delgadez a la cara.

Con esta cirugía, es posible colocar el mentón en la localización idónea para que siga una línea proporcionada en la anatomía facial y solventar un perfil antiestético. El perfil adecuado suele tener el mentón aproximadamente al mismo nivel del labio inferior en el caso de los hombres y 2 milímetros por detrás en el de la mujer.

La mentoplastia no es una intervención quirúrgica invasiva y que puede aumentar el volumen del mentón hasta 7 milímetros. El postoperatorio no es especialmente doloroso y los resultados son para toda la vida.

¿En qué consiste la mentoplastia o cirugía estética del mentón?

Existen diferentes técnicas quirúrgicas para abordar esta cirugía, según el caso a tratar. Se puede realizar bajo anestesia local o con anestesia general, el uso de una u otra lo determinará el especialista después de estudiar la intervención. La duración en quirófano suele ser de entre una y dos horas.

Si el médico especialista determina que se debe usar anestesia general, será necesario que el paciente permanezca ingresado al menos la noche posterior a la intervención, si se trata de una cirugía ambulatoria el paciente regresará a casa tras la cirugía sin necesidad de ingreso.

Para evitar que las cicatrices sean visibles externamente, el cirujano realizará las incisiones en la cara interior de la boca. Desde estas incisiones accederá a la zona a tratar, realizando un espacio en el caso de la implantación de una prótesis o tratando el hueso en el caso de un problema de excesiva proyección del mentón.

• Mentón retraído: Si se trata de un mentón excesivamente pequeño, deprimido o plano, el cirujano implanta una prótesis de silíceo sólida, con el tamaño y forma adecuados a las proporciones del rostro. Es posible sustituir el implante por tejido graso del propio cuerpo mediante infiltración o tratar el problema mediante el adelantamiento de una porción del hueso mandibular.
• Mentón prominente: El exceso de volumen del mentón o que este sea excesivamente pronunciado se soluciona con el limado del hueso mediante una técnica denominada osteotomía, que permite avanzar, acortar o estrechar la mandíbula.

El postoperatorio de la mentoplastia o cirugía estética del mentón

El postoperatorio no se caracteriza por ser doloroso y las posibles molestias serán tratadas con analgésicos comunes. Tras la cirugía es normal que la zona se presente inflamada por unos días, especialmente tras los tres primeros. A la semana de la intervención, esta inflamación remite y la zona recupera su aspecto normal.

Es importante tener un cuidado especial con las cicatrices en las primeras semanas. Al estar en la cara interior de la boca se tratarán con el uso de seda dental, cepillo y enjuagues tras las comidas con una mezcla de clorhexidina y solución salina. Para reducir la inflamación se recurrirá al uso de compresas de hielo durante 20 minutos cada hora sobre el mentón.

Al día siguiente de la intervención, el paciente podrá volver a hacer su vida normalmente. Es recomendable tener ciertas precauciones en las semanas posteriores a la cirugía, como no levantar peso, evitar el deporte de impacto que pueda llevar a golpes en la cara o la exposición a la radiación solar al menos durante los primeros 15 días.

Se estima que la curación completa se produce aproximadamente a los tres meses, periodo en el que se puede ver el resultado global de la cirugía. En cambio, es normal que estos sean visibles desde mucho antes.

Recuerda:

1. La mentoplastia está orientada a corregir un mentón desproporcionado o desequilibrado dentro de la estructura facial.
2. Se trata de una cirugía sencilla, segura, no invasiva, protocolada, controlada y de corta duración.
3. Los resultados son para toda la vida.
4. Las cicatrices no son externamente visibles y el postoperatorio es rápido e indoloro.
5. El paciente puede volver a sus actividades normales a los pocos días de ser intervenido.