El otoño y el invierno son las mejores estaciones para someterse a un tratamiento de rejuvenecimiento facial. Alejarnos de la estación estival y de los excesos que supone, tanto por la exposición al sol, cremas solares, playa, cloro, etcétera, garantiza la optimización de los resultados y favorece a la recuperación correcta de la piel.
De manera natural, la piel realiza su descamación cada 28 días, pero con la edad este proceso se vuelve más lento. De esta forma, las células muertas no se eliminan sino que siguen en la superficie y da a la epidermis un aspecto más envejecido, áspero y con más impurezas como puntos negros, espinillas, además de arrugas, manchas y surcos que aparecen en mayor medida con el paso de los años. Acelerar el proceso de regeneración de la piel es positivo para mejorar su aspecto y que esta luzca más saludable, suave y limpia.
Entre las técnicas orientadas a mejorar el aspecto de la piel dañada o fotoenvejecida, el peeling supone una de las mejores alternativas por su grado mínimo de invasión, la rapidez de la recuperación de la dermis y los buenos resultados que ofrece.
Los beneficios del peeling
- Minimiza arrugas finas y poros dilatados.
- Disminuye o elimina manchas o hiperpigmentaciones.
- Mejora y corrige las secuelas de acné, las imperfecciones, cicatrices y las marcas.
- Acelera el proceso de regeneración de la piel, promoviendo el recambio celular y la eliminación de imperfecciones.
- La epidermis será más permeable a todo tratamiento que se realice a continuación.
Tras el peeling
Es importante una buena hidratación de la piel que es tratada con el peeling, de esta forma se repone el manto protector hidrolipídico. Es necesario proteger la epidermis de la radiación solar y las máscaras descongestivas o calmantes son una buena opción para favorecer la recuperación.
Como cualquier tratamiento de rejuvenecimiento o que ejerza una acción sobre la piel requiere el estudio previo del especialista médico y un seguimiento de todo el procedimiento por un equipo sanitario cualificado y con experiencia. Este es un aspecto fundamental para garantizar el tratamiento y que se haga una actuación adecuada en la piel, especialmente en la cara es extremadamente delicada y estar bajo el cuidado, atención y análisis de un médico especialista es un seguro de efectividad y buenos resultados.