La piel es el órgano más extenso de todo el cuerpo y por esta razón le afecta especialmente el paso del tiempo y las acciones externas. Esto hace que la piel sea vulnerable de presentar signos de envejecimiento, cansancio, marcas, cicatrices y manchas. Para conseguir que la piel esté perfecta sobre todo en el caso de zonas delicadas como el rostro y el cuello existen numerosos tratamientos de rejuvenecimiento facial. Entre ellos se encuentra el tratamiento con PRP o plasma rico en plaquetas pero, ¿Para qué fines se utiliza este tratamiento y qué lo diferencia de los demás?
Tratamiento con PRP o Plasma Rico en Plaquetas
La mayoría de la gente conoce de sobra los tratamientos para combatir los efectos de la edad. Sin embargo, entre los tratamientos más eficaces de Medicina Estética también se encuentra el PRP o Plasma Rico en Plaquetas.
Este tratamiento de rejuvenecimiento facial no está enfocado únicamente a minimizar las líneas de expresión o arrugas y eliminarlas. La principal característica del tratamiento con PRP es la regeneración celular. Esto significa que el plasma rico en plaquetas es especialmente eficaz en la regeneración de los tejidos dañados por lo que es un tratamiento idóneo para eliminar manchas, cicatrices o surcos. Además su aplicación en pieles jóvenes de alrededor de 30 años previene la aparición de arrugas profundas en el futuro.
Una de sus aplicaciones más famosas es la infiltración de PRP en adolescentes o adultos jóvenes que tengan en el rostro marcas evidentes de acné. De esta forma el PRP actúa sobre las cicatrices mejorando la textura de la piel y consiguiendo que tenga un aspecto más liso y luminoso.
Entre sus usos también destaca su utilización en lesiones de músculos o tendones ya que fomenta la regeneración de las células dañadas de los tejidos. Sin embargo, su uso estrella se encuentra en el rejuvenecimiento facial ya que consigue de forma segura y sin riesgos de efectos secundarios una piel uniforme y homogénea en tiempo récord.
¿Cómo se realiza el tratamiento con Plasma Rico en Plaquetas?
Son tres sencillos pasos los que se llevan a cabo para aplicar el PRP o Plasma Rico en Plaquetas. Lo primero es que un médico estético debe realizar un estudio previo sobre la piel del paciente para determinar si éste es el tratamiento adecuado para su caso.
Cuando ya está decidido el tratamiento con PRP se extrae la sangre del paciente mediante un simple análisis básico. Estas muestras de sangre se introducen en un equipo especializado que las centrifuga durante alrededor de 10 minutos para separar las plaquetas de los glóbulos rojos. Por último, tras realizar este proceso se aplica a través de microinyecciones la sangre enriquecida en plaquetas del paciente en las zonas que se desean tratar.
El tratamiento es muy rápido ya que se realiza en sesiones de aproximadamente 20 minutos y el paciente no nota dolor ni molestias. De hecho, tras el tratamiento el paciente puede observar los resultados casi de manera inmediata aunque éstos irán mejorando a medida que pasan los días.
En Cosmédica somos expertos en tratamientos de rejuvenecimiento facial y, por ello, contamos con un equipo médico de referencia en las islas Canarias que te asesorará para que alcances el objetivo que deseas en el menor tiempo posible.