¿Qué talla elegir en el aumento de pecho?
El objetivo de la cirugía de aumento de pecho es mejorar el tamaño y la forma de los senos, pero siempre buscando la proporción con la fisonomía corporal de la paciente. La naturalidad debe ser siempre un factor clave a tener en cuenta, por lo que se debe encontrar el equilibrio entre las proporciones corporales y los deseos de la interesada. La orientación y el asesoramiento es clave para lograr el resultado deseado y esto sólo se consigue con un estudio detallado por parte del cirujano. El médico especialista es el que conoce de medidas y proporciones, posibles complicaciones y el que puede realizar unaadecuada prueba de volumen en consulta.De esta manera, es fundamental entender que el tamaño de la prótesis la decide la propia fisionomía del paciente, no tanto los deseos o los gustos que la persona que quiere operarse. Una talla y una prótesis correcta dependerá de las dimensiones del tórax y las medidas de la paciente, así como de las características de su mama.
¿Cómo se decide qué prótesis corresponde a nuestro cuerpo?
Para alcanzar la talla correcta hay que medir y estudiar la mama:
Medidas:
- Ancho del tórax. Con una cinta métrica flexible medimos el perímetro torácico a la altura del surco inframamario(por debajo del pecho) y el perímetro mamario en su zona más proyectada, normalmente a la altura del pezón.
- Longitud del tórax. Medimos la distancia desde la horquilla del esternón, es decir, entre ambas clavículas, hasta el pezón.
- Proporción altura/anchura del tórax. La relación entre ambas medidas nos dará el tipo de tórax que tenemos, ancho, longilíneo o normal. Este dato que decide qué tipo de implante es el más adecuado según nuestro cuerpo (altura media, bajo o alto, en caso de optar por implantes anatómicos).
- Presencia de anomalías torácicas. Se analiza la mama por si hubiese algún tipo de anomalía o peculiaridad como cifoescoliosis o pectusexcavatum (tórax hundido), o pectuscarinatum (en quilla).
Estudio de la mama:
- Ancho del pecho actual.
- Ancho del pecho que sería adecuado en ese tórax. Para calcular el tamaño correcto y proporcionado del pecho medimos desde el esternón (1-1,5 cm de la línea media) hasta la línea axilar anterior. Estos son los límites que pone nuestro cuerpo.
- “Pinch test”. Con un aparato específico se pinza la mama y determinamos el ancho del tejido mamario. Así estudiamos qué cantidad de glándula va a cubrir el implante.
A la medida de la mama ideal se le resta la cifra del pinch test. Esto nos indica de qué ancho debe ser la prótesis para que las dimensiones finales de la mama sean las correctas.
- Forma de la mama. Valoramos el tamaño y la proporción del pecho natural con respecto al cuerpo, así como si presenta alguna anomalía tipo mama tuberosa, asimetrías…
- Grado de caída. Posición de la areola y del surco submamario y distancia interareolar (entre los pezones).
- Vaciado. Es habitual tras la lactancia o tras la pérdida de peso. El pecho luce vacío resbalando la glándula al polo inferior, lateral o inferior.
Estudio de la piel:
- Piel firme y tensa. Poca distensibilidad, no permite implantes voluminosos pues quedaría tirante.
- Piel con estrías. Un implante muy voluminoso o pesado estirará aun más esta piel y con los años se presentará la mama caída.
Una vez hemos medido qué tamaño de implante viene acorde a nuestra fisionomía debemos decidir que tipo de implante, incisión (normalmente se hace incisión areolar, que deja una cicatriz casi imperceptible) y proyección queremos. Los tipos de implantes son redondos (dan un efecto escote pronunciado) o anatómicos (con forma de lágrima, es una forma más similar a la natural de la mama y el resultado es más discreto).
Una vez se ha decidido y estudiado todo lo anterior se realiza una prueba real, donde unas prótesis simularán el resultado del implante y frente a un espejo podrás juzgar si estás de acuerdo con la talla y los implantes que el estudio y el cirujano consideran.