La época estival es uno de los momentos más esperados del año por muchas personas. La llegada del calor, las vacaciones y, por supuesto, el poder disfrutar de la playa y la piscina son varias de las razones que llevan a adorar el verano.
Sin embargo, también es la estación del año en la que más se preocupa la gente por su apariencia física. Los gimnasios se llenan de personas con ganas de prepararse para lucir sus cuerpos al sol. Por esta razón, también es uno de los momentos en los que más se demandan tratamientos estéticos enfocados a conseguir una piel luminosa y perfecta.
Para lograr una piel radiante en esta época del año la Medicina Estética es una de las mejores aliadas. Hay quienes optan por sencillas limpiezas de cutis, pero los más exigentes quieren lograr los mejores resultados mediante los tratamientos de rejuvenecimiento facial. Con ellos es posible atenuar los efectos del envejecimiento de la piel y también disminuir el aspecto de cansancio producido por el estrés de la vida cotidiana.
Cualquier edad es buena para aplicarse un tratamiento de rejuvenecimiento facial aunque lo más común es a partir de los 30 años en adelante. Cada persona y cada piel requiere un tipo de cuidado específico atendiendo a sus características particulares. Por ello, es necesario acudir a un centro médico especializado para que un médico realice un estudio previo y un asesoramiento personalizado.
Ventajas de los tratamientos de rejuvenecimiento en verano
Entre los diversos tratamientos de rejuvenecimiento facial en Medicina Estética los más demandados son los rellenos faciales y la toxina botulínica. Ambos sirven para lograr una piel perfecta de cara al verano. Sin embargo, cada uno se utiliza para rejuvenecer zonas del rostro diferentes.
El ácido hialurónico es el material de relleno por excelencia y consigue reducir las arrugas y las cicatrices del rostro de forma muy eficaz además de utilizarse para aumentar el volumen de labios y pómulos. Por su parte, la toxina botulínica se utiliza de forma muy efectiva para relajar los músculos causantes de las arrugas sobre todo en zonas como las ‘patas de gallo’ o el entrecejo.
- Ambos son materiales de calidad que ofrecen resultados muy satisfactorios contra el envejecimiento de la piel. Precisamente en verano es el momento idóneo para aplicar estos tratamientos de rejuvenecimiento facial puesto que ofrecen diversas ventajas:
- La aplicación de ambos tratamientos da como resultado una piel homogénea y lisa por lo que a la hora de coger sol facilita el bronceado y evita que queden zonas blancas en los pliegues de las arrugas o líneas de expresión. De esta forma se consigue que el bronceado del rostro quede uniforme.
- Tanto la toxina botulínica como el ácido hialurónico aumentan la producción de colágeno en el organismo por lo que mejorará la elasticidad y la hidratación de la piel lo cual también resulta favorecedor en esta época calurosa.
El verano es una época de altas temperaturas lo cual suele producir un exceso de sudoración en la piel o hiperhidrosis. En este caso, el tratamiento con toxina botulínica ayuda a prevenir la aparición de sudor en el rostro debido a su acción paralizadora de las glándulas sudoríparas.
El verano es una época para disfrutar del sol y lucir una piel bonita, pero es necesario recordar la importancia de la protección solar. Los tratamientos de rejuvenecimiento facial pueden facilitar el bronceado y el aspecto de la piel, pero siempre requieren de un cuidado frente a los rayos ultravioleta para evitar quemaduras y problemas mayores en la dermis.
En Cosmédica somos especialistas en Medicina Estética y contamos con un equipo médico de calidad que te asesorará para conseguir la piel radiante que buscas.